Otra organización con la que colaboramos fue Lakshyam. Se trata de una ONG que recoge fondos para proporcionar educación a la población de los barrios más pobres de Delhi. No es una tarea fácil, no solo deben recoger fondos para crear equipación y pagar sueldos sinó que además deben conseguir que se mantengan dichas instalaciones y qué los niños asistan a la escuela.
Lakshyam trabaja con tres centros en Delhi, pero por problemas de absentismo nosotros sólo pudimos colaborar en dos de ellos: Ghaziabad y Vasant Kunj.
La escuela de Ghaziabad se encuentra en el barrio con el mismo nombre, situado en la parte noreste de Delhi. Esta escuela es un pequeño edificio de tres pequeñas habitaciones: una oficina, siempre cerrada con candado, una sala de costura y un servicio de medicina para los vecinos. Todo está rodeado por una valla de cemento.
Los niños aprenden en una zona exterior cubierta, sobre una alfombra de esparto y con una pizarra. Dentro del recinto también hay una mini furgoneta con el nombre de Lakshyam que sirve de almacén de trastos, otro coche abandonado, unos escombros y unos columpios algo derruidos.
Nos citaron a las 10h, nuestro contacto fue Aishwarya, con ella organizamos a los niños. Debido a la variedad de edad, decidimos hacer dos grupos, y ese día empezaríamos con los más mayores, de 8 a 12 años. Teníamos tiempo limitado ya que a las 13h venía otra visita.
Los niños eran muy vergonzosos, cuando estábamos en círculo las chicas evitaban estar a mi lado, al lado de un hombre, no sabemos si por pudor o por timidez… jajaja… eran graciosas.
Empezamos como siempre calentando, iniciando la concentración del grupo, pidiendo a los niños y niñas que pusieran toda la atención en lo que estábamos haciendo allí… No fue fácil, como suele pasar, pero poco a poco todos empezaron a motivarse.
A medida que avanzábamos con los ejercicios se metían más y más en la interpretación, intentando hacerlo mejor, mostrándose los unos a los otros… todos muy concentrados!!! un amor de niñas y niños!!!!
Las familias, que esperaban medicamentos, de la habitación asignada a ello, rodeaban a los alumnos observando y comentando los ejercicios que realizaban, curiosos y encantados con sus payasadas…
Al final nos faltó tiempo para que todos pudiesen participar, pero volveríamos la siguiente semana… Así que nos despedimos hasta el siguiente día.
Pasó una semana y estábamos allí de nuevo. En esta ocasión Aishwarya no pudo venir, así que intentamos hacer los talleres sin traducción. Reunimos a todos los niños. Nos encantó ver que se habían unido niños que el día anterior nos observaban desde fuera del recinto… iban con sus mejores galas…
Los calentamientos eran repetidos, la mayoría ya los conocía, así que todo funcionó muy fluido. Los siguientes ejercicios eran nuevos y necesitábamos traducción… Por suerte la profesora, que observaba desde la distancian hablaba un poco de inglés y nos ayudó.
Las interpretaciones de los chavales eran emotivas, todos lo intentaban lo mejor que podían, algunos retando a una gran timidez, otros habituados a mostrarse. Como en el día anterior, todas las familias rodeaban a los chicos chicas que hacían los ejercicios, curiosos disfrutaban con las interpretaciones de sus pequeños.
A las 12:30h nos preparamos para hacer el espectáculo. Lo teníamos todo preparado cuando dimos la señal de empezar, y aparecimos… Los chicos y chicas ya estaban motivados, cualquier gesto y movimiento les parecía gracioso. Recibían las acciones con generosidad y se morían de ganas por salir como voluntarios… Así que todo fue muy bien. En este caso yo mismo hice de técnico de sonido, y eso le quitó un poco de fluidez y brillo, pero igualmente todo salió bien, todo muy payaso y los niños lo disfrutaron.
Y finalmente nos fuimos, dejando atrás unos niños hambrientos de juegos, de estímulos, curiosos e inteligentes como cualquier otros niños, pero en un entorno que no ayuda, a ver si el buen trabajo de Lakshyam les puede ayudar a romper la cadena de pobreza que los ata…